Las cánulas se utilizan comúnmente en la estética médica para añadir volumen, perfilar el contorno y corregir varias regiones de la cara, el cuello, las manos, el escote y otras zonas del cuerpo. El uso de cánulas de punta roma para el lifting facial en zonas como la depresión lagrimal, la frente, las sienes y todas las demás zonas de la cara tiene varias ventajas.

 

¿Cuáles son las principales diferencias y posibles complicaciones
entre aguja y cánula?

Probablemente la diferencia más obvia entre una aguja y una cánula es que la punta de la aguja es afilada mientras que la cánula es lisa o roma. Una de las principales cuestiones que se plantean cuando se utiliza una aguja para administrar un relleno dérmico es la probabilidad de que se produzcan hinchazones y hematomas después del tratamiento. Una vez que se inserta la aguja, existe la posibilidad de que perfore los vasos sanguíneos que se encuentran debajo de la piel, lo que resultará en un moretón.

Si bien los profesionales pueden tomar diversas medidas y utilizar sus conocimientos sobre la anatomía facial para minimizar el riesgo de hematomas, ni siquiera los más experimentados pueden garantizar que un paciente definitivamente no se libre de pequeños moretones. Por el contrario, una cánula no presenta los mismos riesgos debido a su punta roma. Si bien se utiliza una aguja de pequeño calibre para hacer el punto de entrada inicial, una vez que la cánula se inserta en la piel, es mucho menos probable que perfore y atraviese ningún vaso sanguíneo. A diferencia de la aguja, la cánula, implemente se desplaza entre los vasos sin romperlos, causando menos trauma debajo de la piel y por lo tanto, menos posibilidades de hematomas después del tratamiento. Otro riesgo relacionado con la punta afilada de la aguja no es sólo perforar el vaso sanguíneo, sino también inyectar el relleno en él, lo que provoca una oclusión vascular que, a su vez, puede dar lugar a complicaciones mucho más graves. Una vez más, hay ciertas medidas que los profesionales adoptan para asegurar que esto no suceda, sin embargo, es algo que debe considerarse cuando se utiliza una aguja. El riesgo de una oclusión vascular es una de las razones por las que muchos
profesionales prefieren utilizar una cánula en las zonas de «alto riesgo», como alrededor de los ojos, ya que, a diferencia de una aguja, una cánula no perforará ningún vaso sanguíneo en la zona y, por lo tanto, es menos probable que cause complicaciones graves.

Canulas

  • 18G x 70mm
  • 22G x 50mm
  • 23G x 50mm
  • 25G x 35mm
  • 27G x 35mm
  • 30G x 35mm

 

Agujas

  • 34G x 13mm